¡Ya vienen los Reyes Magos, ya vienen los Reyes Magos ...!

¿Quién no conoce a los Reyes Magos?

¿Quién no ha ido a una cabalgata? ¿quién no les ha visto cuando, ya metiditos en la cama, les esperamos con ilusión y abrimos los ojos y les vemos colocando regalos?. Habrá quién les haya visto también en la misa del día 6 de enero. Ocasiones no han faltado...

Y seguro que cada uno de nosotros tenemos un favorito porque, aunque nos gusten los tres, es normal sentir predilección por alguno. A mí siempre me ha gustado más Melchor, pero Gaspar y Baltasar también me caen muy bien...

Queda claro que les hemos visto, pero ¿les conocemos? Veamos qué nos cuenta el evangelista Mateo sobre ellos...

"Habiendo nacido Jesús en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén preguntando: «¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo».

...de pronto, la estrella que habían visto salir comenzó a guiarlos hasta que vino a pararse encima de donde estaba el niño. Al ver la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa, vieron al niño con María, su madre, y cayendo de rodillas lo adoraron; después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. 

Y habiendo recibido en sueños un oráculo, para que no volvieran a Herodes, se retiraron a su tierra por otro camino."

El evangelista nos cuenta que los magos venidos de Oriente obsequiaron a Jesús con "oro, incienso y mirra" pero, ¿sabes por qué le hicieron estos regalos?. Vamos a verlo. 

• Le entregaron Oro, un metal precioso, un regalo con mucho valor, porque Jesús es Rey (el último domingo de noviembre celebramos la festividad de Cristo, Rey del Universo). A los reyes se les hacen regalos valiosos... El Oro nos recuerda que Jesús es Rey

• Le entregaron Incienso, una sustancia aromática utilizada en la antigüedad como ofrenda. Jesús es Dios, y a Dios le hacen esta ofrenda. El incienso nos recuerda que Jesús es Dios

• Le entregaron mirra, una resina que se utilizaba para embalsamar cadáveres. Jesús, como hombre, tiene que morir. La mirra nos recuerda que Jesús es Hombre

¿Te imaginas que pudieras ser un Rey Mago? ¿Le regalarías a Jesús Oro, Incienso y Mirra? Pues yo creo que todos podemos ser un poquito parecidos a los Reyes Magos. 

• Pensarás que no tenemos oro para regalar... ¿Estás seguro?. El oro es algo muy valioso y te preguntarás de dónde sacarlo ¿verdad? Piensa en algo que tengas y que sea muy valioso para Dios ¿se te ocurre algo? Para Dios lo más valioso eres tú mismo, cada uno de nosotros y, aunque no seamos de oro, podemos convertirnos en un regalo para Jesús ¡¿Cómo?! pues poniendo nuestro talento al servicio de los demás... ¡Fácil!
• Ahora que ya le hemos entregado el oro, ¿de dónde sacamos el incienso? Antes hemos visto que el incienso se utilizaba para hacer ofrendas a Dios. ¿Qué podemos ofrecer nosotros a Dios? ¿Qué podemos entregarle como ofrenda? Pensemos en algo que le gusta mucho a Dios y que tenemos, y que sólo depende de nosotros: nuestra oración. ¡Fácil!
• Sólo nos queda la mirra, esa resina que se usa para embalsamar cadáveres. ¡Uf, esta va a ser difícil de conseguir! A ver qué encontramos que nos sirva... Bueno, la mirra se la regalaron a Jesús como Hombre. Y nosotros, como hombres, como seres humanos, tenemos muchos regalos a nuestro alcance. Incluso los Reyes Magos nos van a traer nuevos obsequios. Tal vez podamos compartir con quienes tienen menos que nosotros: compartir ropa, compartir comida, compartir juguetes, compartir lo que he aprendido en el colegio... Este regalo, el compartir, es mucho mejor que la mirra, y podemos hacerlo. ¡Fácil!

Parecía difícil, pero no, al contrario ¡ES FÁCIL! 

¿Has visto como todos podemos ser un poquito Rey Mago para los demás? Recordémoslo esta noche, antes de ir a dormir, cuando estemos esperando que Melchor, Gaspar y Baltasar pasen por casa a dejar lo que les hemos pedido. Hagamos el propósito de ser Rey Mago todo el año, con nuestro trabajo, con nuestra oración y compartiendo lo que tenemos.

¡Feliz noche de Reyes!

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