Santa Teresa de Jesús

Hoy celebramos la festividad de Santa Teresa, patrona de la ciudad de Ávila, capital de nuestra provincia. Os deseamos un feliz día y felicitamos a quienes celebran su onomástica.

 

Éxtasis de Santa Teresa, Bernini

 Teresa Sánchez Cepeda Dávila y Ahumada nació en Ávila el 28 de marzo de 1515 y murió en Alba de Tormes, el 4 de octubre de 1582. Fue la tercera de los diez hijos de Don Alonso Sánchez de Cepeda, con su segunda esposa, doña Beatriz Dávila y Ahumada. Del primer matrimonio de su padre tuvo dos hermanastros.

Recibió el sacramento del bautismo el día 4 de abril del año de su nacimiento. Desde temprana edad muestra interés por las vidas de los santos y las gestas de caballería. Esta afición aventurera le lleva a intentar una fuga con su hermano Rodrigo para convertirse en mártir en tierra de moros, aventura que fue frustrada por su tío que los descubre y acaba con el intento, razón por la que cambian el juego por el de ser ermitaños haciéndose una cabaña en el huerto de la casa.

A temprana edad la corteja un primo suyo pero al morir su madre en 1528 y, aunque ella pide entonces a la Virgen que la adopte hija suya y a pesar de ser “… enemiguísima de ser monja,” (Vida 2,8), su padre decide internarla en 1531 en el colegio de Gracia, regido por agustinas, ya que no veía con buenos ojos la relación con el joven primo. 

Convento de La Encarnación, Ávila

Ella echará de menos al joven pero terminará por encontrarse muy a gusto a la vez que la vocación religiosa se le va planteando como una alternativa hasta que en 1535, con pleno convencimiento y la oposición de su padre, ingresa como postulanta en el convento de  La Encarnación, en Ávila.

En 1537, a causa de una grave enfermedad, su padre la saca de la Encarnación para darle cuidados médicos, pero no mejora y llega a estar 4 días inconsciente. Todo el mundo la da por muerta. Finalmente se recupera y puede volver a La Encarnación en 1539, aunque  las secuelas le impedirán valerse por sí misma alrededor de 3 años.

Su padre fallece en 1544.

Evoluciona y su oración se llena de visiones y estados sobrenaturales y, aunque tiene experiencias místicas elevadas, es una visión muy viva y terrible del infierno la que le llama a querer vivir su entrega religiosa con todo su rigor y perfección,  y le lleva a la reforma del Carmelo y la primera fundación:el convento de San José de Ávila, el 24 de Agosto de 1562.

Tiempo después le llegan instrucciones y autorización para fundar más conventos, comenzando una intensa actividad que Santa Teresa que sólo termina con su muerte. Durante ese tiempo compaginará el gobierno de su orden, con las fundaciones de nuevos conventos y la redacción de sus libros.

Llegó a fundar 17 conventos: Ávila (1562), Medina del Campo (1567), Malagón (1568), Valladolid (1568), Toledo (1569), Pastrana (1569), Salamanca (1570), Alba de Tormes (1571), Segovia (1574), Beas de Segura (1575), Sevilla (1575), Caravaca de la Cruz (1576), Villanueva de la Jara (1580),  Palencia (1580), Soria (1581), Granada (1582) y Burgos (1582), en el año de su muerte.

La fundación de Granada la hizo Ana de Jesús, aunque en vida de la Santa, por lo que no siempre aparece en las enumeraciones.

Muere sin haber publicado ninguna de sus obras, sin haber logrado fundar en Madrid (a pesar de su ilusión), sin haber separado la orden de descalzos de la de calzados y con dudas sobre si sus monasterios se podrían mantener con el espíritu que ella infundió.

Escribió muy poco por iniciativa suya, sus obras maestras son fruto de la obediencia a sus superiores. 

Fue beatificada por Pablo V en 1614, canonizada por Gregorio XV en 1622, y nombrada doctora de la Iglesia Universal por Pablo VI en 1970. La primera mujer de las tres actuales doctoras de la Iglesia. Las otras son Santa Catalina de Siena y otra carmelita descalza: Santa Teresita del Niño Jesús.

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