San Pedro de Alcántara

Hoy, 19 de octubre, se conmemora la festividad de San Pedro de Alcántara. Nos unimos en la celebración al pueblo vecino de Arenas de San Pedro que tiene en el santo a su patrón y recordamos que, con motivo del IV centenario de la Beatificación del santo alcantarino, desde hoy y hasta el 19 de octubre de 2022, se celebrará un año jubilar en la localidad de Arenas de San Pedro teniendo como templo jubilar el Santuario de San Pedro de Alcántara, lugar de descanso de los restos del santo.

El nombre de nacimiento de San Pedro de Alcántara era Juan de Garavito y Vilela de Sanabria. Nació en la localidad cacereña de Alcántara, en 1499 y murió en Arenas de San Pedro (Ávila) el 18 de octubre de 1562 a la edad de 63 años.

Nacido en el seno de una familia noble fue enviado por sus padres a estudiar leyes a la Universidad de Salamanca pero abandonó los estudios para tomar los hábitos en 1515 en el convento franciscano de San Pedro de los Majarretes con el nombre de Fray Pedro de Alcántara.

Fue amigo y consejero de Santa Teresa de Jesús y Carlos I quiso tenerlo por confesor en su retiro de Yuste pero el santo declinó la solicitud real.​

Su vida de contemplación no fue impedimento para hacer largos viajes, especialmente por Extremadura y Portugal. Caminaba descalzo, y se contaban los prodigios que ocurrían en torno a su persona como serían pasar el Tiétar sobre las aguas, el no mojarse en plena tormenta o el que la nieve formase una pequeña cavidad a su alrededor en el puerto del Pico cuando regresaba de un viaje a Ávila.

En 1560 se encuentra con Santa Teresa con la que trata sobre la fundación del convento de Arenas, tras haber concluido antes las del convento de La Viciosa y del Rosario en términos de Oropesa. Entre ambos santos surge una profunda y sincera amistad que hará de él el consejero de la santa que la orienta y anima para iniciar la reforma del Carmelo con la fundación del convento de San José de Ávila.

Es durante un viaje a Ávila cuando Pedro de Alcántara conoce en Arenas la ermita de San Andrés del Monte, a poco más de dos kilómetros de la villa. Del primer tercio del siglo XVI y estilo gótico isabelino, la  pequeña edificación ocupaba poco más de treinta metros cuadrados. La cofradía arenense de San Andrés se la ofrece para la fundación de un nuevo convento de su reforma. Cuentan las crónicas que tanto agradó al santo el lugar que exclamó: «Dios tiene grandes designios sobre este lugar».  

Es enctonces cuando fray Pedro fija su residencia en Arenas, en la primavera de 1562 y, a causa de su enfermedad, fallece en la villa el 18 de octubre de ese mismo año

Al tener noticia de su muerte las gentes de Arenas y sus alrededores acudieron en masa a dar su último adiós a aquel al que todos consideraban santo.

Fue enterrado en la iglesia del convento de San Andrés del Monte. Con motivo de su beatificación, la villa lo declara patrón en 1622 y desde entonces se le honra en el día de su fiesta el 19 de octubre de cada año.

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